Hoy en día, uno de los desafíos más apremiantes que enfrentamos es la modernización de nuestra infraestructura eléctrica. Este proceso es esencial para poder integrar y distribuir de manera eficiente energías renovables como la solar de nuestros valles y la eólica de nuestras comunas costeras.
En cada conversación con la ciudadanía y con los distintos actores del sector energético, siempre destacamos que nuestra política nacional de energía es transversal y fija objetivos que nuestro gobierno hace propios. La transición hacia energías limpias nos presenta desafíos que estamos superando con una hoja de ruta clara. Sin embargo, a menudo los grandes números positivos nos hacen perder de vista un reto crucial: la inclusión y participación de las mujeres en el sector.
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En cada conversación con la ciudadanía y con los distintos actores del sector energético, siempre destacamos que nuestra política nacional de energía es transversal y fija objetivos que nuestro gobierno hace propios. La transición hacia energías limpias nos presenta desafíos que estamos superando con una hoja de ruta clara. Sin embargo, a menudo los grandes números positivos nos hacen perder de vista un reto crucial: la inclusión y participación de las mujeres en el sector.