El exsubsecretario de Obras Públicas y expresidente del directorio del Metro de Santiago, Clemente Pérez, advirtió sobre la baja confianza ciudadana en torno a las concesiones y cuestionó el fuerte recorte presupuestario al MOP para 2026.
Pérez explicó que la reducción del 17,2% en el presupuesto del ministerio y del 38% en la Dirección General de Concesiones limita la posibilidad de reactivar el crecimiento.
“Esa plata financia proyectos que luego se levantan con inversión privada”, sostuvo, lamentando que la falta de planificación retrase obras claves.
Citó como ejemplo el Centro de Justicia de Santiago y tres cárceles —Alto Hospicio, La Serena y Rancagua— que siguen sin nueva licitación, lo que obliga al Estado a negociar directamente con concesionarios. “Se pierde competencia y, con ella, la oportunidad de mejorar infraestructura y condiciones de seguridad”, afirmó al ser consultado por Tomás Mosciatti.
El exsubsecretario también criticó la demora en proyectos como el Hospital El Salvador y el puente Chacao, señalando que la “permisología” y la falta de gestión han frenado inversiones por millones de dólares. “Los funcionarios deben hacer su trabajo; no basta con oficios y trabas administrativas”, dijo.
Respecto de la imagen pública del sistema, Pérez reconoció un problema profundo: “Las concesionarias hoy tienen poco respaldo social”. Según explicó, la caída en la competencia licitatoria —de 4,6 a 1,5 empresas por concurso— ha elevado tarifas y afectado la percepción ciudadana. “Tenemos que mejorar la relación con la comunidad, aumentar la competencia y revisar las tarifas cuando las obras ya están pagadas”, planteó.
El también vocero de infraestructura del equipo de Evelyn Matthei, advirtió que, sin inversión privada, será imposible sostener el desarrollo del país. “El Estado no tendrá los recursos en los próximos años, y si no fortalecemos las concesiones, nos vamos a quedar atrás”, concluyó.